Lúcete en tu boda con un cortador de jamón, mesas de quesos, Pop corn bar y mucho más

¿Estás preparando el catering de tu boda y no sabes qué elegir? Aquí te dejamos unas cuantas ideas para hacer de tu día el más original y especial, pero no te quedes solo buscando el mejor restaurante para bodas, da un paso adelante.

Cortador de jamón

Muchas parejas, y cada vez más, se plantean a la hora de organizar la boda si contratar o no a un cortador de jamón profesional. La primera pregunta que se hacen cuando oyen hablar de esta idea es: ‘¿es caro?’. Habrá el que piense que es el día más importante de su vida y que hay que tirar la casa por la venta. En cambio, la respuesta, para aquellos más cautos, es que el precio dependerá del número de piezas, la profesionalidad del cortador de jamón y la zona donde se desarrolle la boda. El precio también dependerá de la calidad del jamón que elijamos para la boda.

Una vez resuelta las dudas económicas, si hemos decidido complementar nuestra boda con un cortador de jamón, la segunda pregunta es ¿cuándo queremos que se corte el jamón ibérico? Existen diversas opciones: algunos optan porque el espectáculo tenga lugar mientras se desarrolla el cóctel previo a la boda y otros prefieren que esto sea tras la comida o cena una vez que han pasado unas horas del banquete. Algunas de las bodas adquieren un encanto especial, cuando al desarrollarse en un jardín, los invitados pueden disfrutar de una loncha de jamón ibérico recién cortado. Y no solo los invitados, los novios también, dado que en ocasiones pueden envasar el jamón cortado y tener el sabor de su boda todavía unos días después.

Una de las cosas más llamativas o que lucirán más en tu boda son los platos y las decoraciones que los cortadores de jamón realizan con el jamón ibérico.

En nuestro Restaurante El Lomo – El Jardín de Amelia el cortador de jamón dispone de jamón ibérico de bellota 100% y una mesa de quesos Manchegos y europeos, que  forman parte de inicio en la oferta que proponemos para los cocktails de bienvenida.

Además de un showcooking con un cocinero que prepara in-situ huevos de codorniz sobre lascas de jamón serrano y pan de los pocicos.

También tenemos la opción de elegir entre un Sushi-bar combinando productos orientales con productos de la tierra y un rincón Manchego.

Mesas de quesos

Adaptándose a la tendencia vegetariana de la sociedad en los últimos años, los banquetes para bodas han dado un empujón en lo que a mesas de quesos se refieren. Estas mesas están orientadas al cóctel previo al banquete como una buena bienvenida en la recepción.

Las mesas de quesos pueden ser desde mesas repletas de distintos quesos, tanto en sabor como en curación, tanto de vaca como de cabra, como de quesos mezclados con distintos sabores, por ejemplo, canapés de queso con una nuez encima, de queso con uva, con manzana, higos, etc., y de queso con cebolla confitada, los cuales son siempre un acierto seguro.

También podemos usar mermeladas de temporada como complemento para nuestros quesos: desde mermeladas de kiwi, de mango o de tomate, e incluso de otros sabores menos comunes como mermelada de cebolla, de pimientos o de zanahorias.

Candy Bar

Si pensamos en bodas al aire libre rodeadas de jardines, la mayoría apuestan por un Candy Bar. Esto se debe a que la gran mayoría de los novios ven el Candy Bar como una opción para aportar un toque más de color a la boda. En el caso en el que las bodas son monocolor (amarillo, azul, verde, etc.), les permite continuar con la armonía en diferentes tonalidades, pero si la boda es multicolor o queremos aportar un rayo multicolor o retro, estas mesas son más flexibles que un cortador de jamón, o como veremos, el Pop corn Bar.

Las mesas de golosinas también tienen una amplia gama de opciones y variedad. Con ellas podemos jugar con los colores, texturas y sabores. Si el color no es un determinante de nuestro Candy Bar, podemos elegir entre los dulces con chocolate, con frutas o con caramelo extra. Incluso, podemos combinarlos todos. Apostar por la variedad permite que los invitados se deleiten con los sabores más peculiares.

Pop corn Bar

Aunque al principio podéis pensar que esto no es para vuestra boda, con la adecuada decoración y teniendo claro el estilo que queremos que aporte a nuestra boda, un Pop corn Bar puede ser un toque de originalidad más para nuestra boda. Se trata de algo menos visto y más original que las Candy Bar de las que hemos hablado anteriormente.

El Pop corn Bar puede tener la forma de una mesa decorada, ser un carrito de palomitas o ser una máquina de palomitas antigua, dándole un toque vintage a nuestra boda.

Este tipo de catering no apuesta por un carrito de palomitas clásicas, se trata de una experiencia para los sentidos, de probar cosas nuevas y, sobre todo, que tanto nosotros como nuestros invitados recuerden el día de nuestra boda como el día en el que probaron todos los sabores habidos y por haber de palomitas.

Si creíamos que las palomitas solo existían de dos clases, estábamos muy equivocados. Desde palomitas dulces bañadas en chocolate, en caramelo, palomitas con Oreo, Snickers o Lacasitos, hasta palomitas saladas con frutos secos. Y por si esto no te sorprendiera lo suficiente, solo para los más arriesgados, también las hay picantes.

Si en lugar de que tus invitados disfruten de la experiencia de los sabores, preferís optar por el toque más clásico en el que las palomitas se empaquetan como antes, con un toque retro, o en cajitas originales, tanto vosotros como vuestros invitados, podréis conservarlos para el recuerdo.

S’Mores Bar

Los S’Mores Bar son la última moda en dulces para bodas y se debe a que conquista tanto a mayores como a los pequeños. Si recordáis las nubecillas o marshmallows que se derretían al fuego en los campamentos, en esto consiste el S’Mores Bar. Este puede ser el gran toque de originalidad para vuestra boda. Existen dos tipos principales de S’Mores, aquellas que se tratan de una larga barra con pequeñas velas o mecheros a modo de hoguera, imitando los campamentos, o bien con un carácter más vintage para que combine con la temática de nuestra boda.

No consiste solo en derretir los marshmallows entre ellos, los invitados pueden colocar desde pequeños trozos de chocolate hasta bañarlos en caramelo.

Mesas dulces

Si no te gustan ni las golosinas ni las palomitas, pero sigues siendo un fan de lo dulce, no desperdicies tu oportunidad de disfrutar de una mesa dulce para tu boda. Esta mesa de postres puede atraer a tus invitados ya sea por la decoración, por los aromas o por los sabores.

Si la decoración es importante, hacer que sea deliciosa debe ser nuestra prioridad. Nuestros invitados recordarán más la decoración si lo que adornaba, era la mejor galleta de pepitas de chocolate que hemos probado en nuestra vida. Pero no hay que pensar que una mesa de dulces debe ser de galletas, la mesa de dulces puede contener todo lo que tú seas capaz de imaginar, desde galletas de diferentes sabores, postres que varían (sabor, forma, textura,…), pero también diferentes postres que estén decorados conforme a una temática. Si creías que ya lo habías visto todo, estas mesas de dulces pueden ir acorde con películas famosas como Harry Potter o series como Juego de Tronos, acompañando a las bodas más alternativas. También podemos elegir que estas sean autoservicio o con un catering de bodas.

En estos cuatro últimos casos, lo más complicado es decidir cuándo montarlo y prepararlo para que los invitados lo disfruten y tengan el éxito que queremos que tenga. La clave del éxito es que se monten después del baile de los novios, que suele ser sobre una hora o dos desde que se sirvió la tarta. Teniendo en cuenta que después de la tarta se tira el ramo, se hacen los agradecimientos, se proyectan vídeos o se disfruta de los jardines para bodas y, finalmente, llega el baile nupcial, no parece que la espera vaya a ser un problema. Lo normal es que el Candy Bar o la Pop corn Bar coincidan con la barra libre. Una vez que nuestros invitados hayan comenzado a bailar, necesitarán reponer fuerzas o, al menos, tendrán interés en probar nuevos sabores.

La decoración en ellos va a ser el primer atrayente para nuestros invitados, por ello, es importante recalcar la importancia de la originalidad de los mismos. Y si queremos todavía más podemos complementarlo con un Donut Bar, que sigue la misma línea que los anteriores.

Por tanto, lo primero que nos debemos plantear cuando pensamos en ser el centro de atención de las bodas originales tiene que ser si queremos que este toque sea salado o dulce. Si queremos que sea salado, tenemos dos opciones que están en el top de la originalidad: un cortador de jamón, que deleite a nuestros invitados con unas lonchas de jamón ibérico perfectamente cortadas o con la decoración de los platos, o una mesa de quesos, apostando por una experiencia de sabor en la que se combine un sabor salado con algo más dulce o las mermeladas más innovadoras.

En cambio, si preferimos algo que endulce nuestro día especial podemos optar por mesas de dulces, de gominolas, de palomitas o, incluso, de S’Mores Bar o Donut Bar, especialmente cuando se trata de bodas en jardines. Estas mesas suelen servirse tras el baile nupcial y al igual que lo anterior consiste en una experiencia de sabores de vanguardia.